¿Por qué es importante el autoconocimiento? ¿No surge de manera automática? El autoconocimiento es la habilidad que cada persona desarrolla al conocer y reconocer sus emociones, sentimientos e ideas; así como identificar los efectos que estas tienen en sobre sí misma. Esta habilidad suena a que debería de surgir de manera automática, casi innata. ¿Cómo sería posible que uno no se conociera a si mismo?
El autoconocimiento es una habilidad que empezamos a desarrollar desde la niñez, cuando poco a poco las personas que nos rodean nos van explicando qué sucede en nuestro entorno, así como las reacciones que estamos teniendo ante este. Cada vez que una persona nos ayudaba a procesar información era una manera de conocernos mejor. Entre más conocemos de nuestro entorno, mejor entendíamos las reacciones que tenemos, por ejemplo: Primero, tuvimos que aprender el dolor en el estómago después de mucho tiempo sin comer era hambre. Tuvimos que reconocer qué le sucedía a nuestro cuerpo ante estas circunstancias. Después, nos damos cuenta que cuando uno tiene hambre también empieza actuar de manera distinta, ya sea de mal humor, más irritable o con sueño. Las primeras veces que algo sucede no nos damos cuenta y necesitamos que nuestro entorno lo refleje. Es así, que entre el reflejo que presenta nuestro entorno y nuestra capacidad de escucharlo que uno va conociéndose mejor. Esto suena interesante, pero ¿para qué nos sirve?
El autoconocimiento nos brinda más herramientas para responder a nuestro entorno, es decir, saber qué nos sucede; permite que entendamos qué estás sucediendo y cómo es que nos está afectando. Saber que uno no se siente bien o mal de la nada permite comprender qué está pasando y tomar decisiones que se basen en nuestro bienestar. Al estarnos auto-observando y auto-conociendo podemos tomar mejores decisiones sobre dónde y cómo queremos estar.
Uno podría pensar que adquirir estas habilidades es sencillo y que deberían de estar perfectamente desarrolladas. El problema que comúnmente surge para adquirir estas habilidades es que la gente que nos rodea tampoco reconoce qué sucede y por ende no lo explica. Pueden existir personas en nuestro entorno que tampoco sepan regular sus reacciones, que a la hora de enojarse no identifica ni el porqué y sólo lo sacan con la primera persona que se encuentran fuera. Resulta muy difícil controla algo que no entiendes de dónde surge y por qué está ahí.
El autoconocimiento no es una herramienta que automáticamente arregle nuestro control de impulsos o cómo nos sentimos, si no que es el inicio de un cambio para tomar decisiones más informadas. Saber qué nos sucede permitirá que interactuemos con el mundo desde una postura más informada. Saber qué te hace reaccionar y cómo sueles actuar te permitirá generar un plan de acción para las situaciones que te encuentres en tu vida cotidiana.
¿Tú, ya identificaste cómo te sientes el día de hoy? ¿Qué ha sucedido hoy para que te sientas así? ¿Qué puedes hacer para hacer que tu día se mantenga así, o mejore? Recuerda, con preguntas así de simples puedes empezar a generar un cambio en tu vida.